Las ollas de barro ofrecen un sabor único a los alimentos, pero requieren una preparación especial antes de usarlas. Descubre cómo tratar una olla de barro nueva para evitar que se rompa y garantizar una cocción perfecta.
Introducción
En este artículo veremos cómo tratar una olla de barro nueva antes de utilizarla. Aunque las ollas de barro son cada vez menos usadas, su sabor es incomparable. Por ejemplo, para una receta tradicional como el ragú de jabalí, una olla de barro es indispensable. Ahora te mostraré paso a paso qué hacer para prepararla de la mejor manera y prevenir posibles roturas.
Fase 1: Inmersión en Agua
Lo primero que hay que hacer es sumergir completamente la olla de barro en agua durante veinticuatro horas. Puedes usar una palangana o, si es necesario, la bañera. Este paso sirve para recuperar la humedad perdida durante la cocción. Durante la inmersión, se formarán micro burbujas, pero no te preocupes, es completamente normal.
Fase 2: Secado
Después de veinticuatro horas, saca la olla del agua y sin secarla manualmente, colócala en una posición donde pueda secarse por sí sola. Es importante que el aire pueda circular tanto dentro como fuera de la olla. Yo la pongo en diagonal con la parte trasera hacia arriba y la dejo secar durante tres o cuatro horas.
Fase 3: Frotado con Ajo
Una vez seca, toma un diente de ajo, córtalo por la mitad y frótalo con fuerza por el interior de la olla. Este paso sirve para cubrir los micro agujeros naturales del barro. Después de completar esta operación, deja secar la olla durante otras dos o tres horas.
Fase 4: Lavado
Cuando el ajo se haya secado, lava la olla como lo harías con una olla normal, utilizando jabón para platos. Sécala bien y déjala al aire para un secado completo. En este punto, tu olla de barro está lista para ser usada.
Consejos Finales
Recuerda usar siempre un difusor de llama y no poner la olla directamente sobre el fuego. Mantén la llama a un nivel medio o bajo para evitar que la olla se rompa. Finalmente, evita los cambios bruscos de temperatura: nunca pongas una olla caliente bajo agua fría y viceversa.
Conclusión
Siguiendo estos pasos, puedes estar seguro de que tu olla de barro estará lista para usar y durará mucho tiempo. Espero que estos consejos te hayan sido útiles. ¡Nos vemos en la próxima!
